Positividad retrasada: ¿Qué es?
¿Has oído hablar de la positividad retrasada en el COVID? Te contamos todo sobre este fenómeno que hace dar negativo en los test de antígenos.
La positividad retrasada es un fenómeno que se está viendo mucho en las últimas semanas. Muchas personas están dando negativo en los test de antígenos aun teniendo los síntomas frecuentes de infección por coronavirus.
España se encuentra en plena ola de COVID con la llegada de las nuevas variantes BA.4 y BA.5, aún más contagiosas que las anteriores. Estas variantes son las culpables del aumento de contagios y hospitalizaciones en nuestro país.
Con todos estos contagio y las salidas vacacionales, la venta de test de antígenos han vuelto a dispararse. Pero muchas personas que presentan síntomas de contagio por COVID se han sorprendido al ver que estos test han arrojado un resultado negativo. Lo que les ha llevado a descartar coronavirus y han continuado con su día a día sin tomar precauciones. Sin embargo, a los pocos días, los síntomas han persistido y al realizarse otro test de antígenos, este ha dado positivo.
¿Por qué ocurre esto?
Con las nuevas variantes BA.4 y BA.5 se han reducido los tiempos de incubación. Esto implica que nuestro sistema inmune tarda menos en reaccionar al virus y, por lo tanto, los síntomas aparecen antes: congestión nasal, fiebre, fatiga…
Según ha informado la agencia de seguridad sanitaria del Reino Unido, el periodo de incubación de la variante Alpha era de 5 a 7 días y con Delta se redujo a cuatro días. Y con Ómicron, el periodo entre la infección y la aparición de los síntomas se acortó a solo 3 días.
Las vacunas están siendo un factor determinante. Antes los síntomas aparecían en pleno pico de contagio, cuando la carga viral era mayor. Las vacunas hacen que nuestro cuerpo detecte el virus más rápido y lo neutralice. esto esplica que los síntomas ahora sean más leves y duren menos tiempo.